Humean las armas de la facción comunista. El fusilamiento, esa fórmula punitiva exclusiva de la izquierda, ha dejado sentir su presencia. Los soldados, tocados con gorra, han llevado a cabo la acción sin consideraciones éticas que valgan, sin que se muestre más que una maquinaria al servicio de su lider. Mientras, oculto en una habitación del primer piso del edificio, el Ejecutor y sus camaradas prosiguen a lo suyo. Han desembarcado los yankees, que siguen emperrados en curar (atención a la insistencia) a los campesinos. Naturalmente, ellos van a impedirlo. ¡Cómo se le puede ocurrir a nadie que las izquierdas en América Central o Sur hayan pensado alguna vez en el bienestar del campesinado! Son los Estados Unidos los que, con sus ejércitos de médicos y enfermeras (entre los que se colaba algún Thor de cuando en cuando) han mostrado la humanísima compasión característica de todos sus Gobiernos. Como la muestran ahora en ese lugar de Oriente Medio donde la situación es bastante buena.
La acción continúa y el trasunto humano de Thor, amén de su linda enfermera (en los comics de Lee-Kirkby, las mujeres son enfermeras o ayudantes de laboratorio o secretarias y los hombres médicos, científicos o empresarios: y muéstrese bien la jerarquía entre sexos) han sido capturados. Ahora… ¿Qué es lo que quiere un infame latino (todos son bigotudos o barbudos y feos) de una estadounidense (esto es, blanca, rubia, delgada, hermosa y joven)? Pues qué va a ser. Los extranjeros siempre quieren acostarse con nuestras mujeres. Y, para colmo, son tan zopencos que no conocen las maneras del cortejo. Así que siempre urden unas tramas malignas para tratar de llevarlas a la cama. Todo eso, cuando tienen el tiempo suficiente y no las violan sin contemplaciones. El Ejecutor, al menos, adopta la primera fórmula: tras un brusco galanteo (bravamente respondido por la enfermera, que le echa en cara su fealdad latina), y ante la amenaza de fusilar al doctor Blake, le propone matrimonio. Eso, amigos, es el amor fuera de Estados Unidos. Así se comportan estos salvajes con la florida juventud yanqui.
Por descontado, lo de los maltratos a los cojos es locus comunis. Es algo común al sur del Río Bravo. ¿O no?
Por descontado, lo de los maltratos a los cojos es locus comunis. Es algo común al sur del Río Bravo. ¿O no?
No hay comentarios:
Publicar un comentario